Hoy quiero hablarte de algo interesantísimo y que puede ser de ayuda para dos cosas:
la primera, para reafirmar tu interés en el Yoga o, si aún no te has decidido a practicar, a darte un impulso para hacerlo;
la segunda, para aportar un poco de luz sobre algunas cuestiones que, si no has incursionado mucho en el “mundo del Yoga” pueden pasarte desapercibidas y que, creo, es justo que sepamos (y valoremos).
Así que, en este Blog, quiero contarte sobre cómo algunas técnicas y claves filosófico / psicológicas de la sabiduría ancestral del Yoga, gracias a sus efectos ahora comprobados científicamente y a sus resultados sorprendentes, hoy están siendo “rebautizadas” y utilizadas con otro nombre en terapias psicológicas y físicas, atrayendo el interés de cada vez más personas .
Y esto que voy a contarte no viene de crítica o de acusación de "plagio" (aunque sí creo que informar del origen de estas prácticas sería lo justo) sino de la alegría de saber que, la profunda sabiduría del Yoga sigue demostrando su relevancia en el bienestar integral de las personas, adaptándose a las necesidades y avances de la sociedad actual y que, finalmente, estas técnicas están cada vez más cerca de formar parte de nuestro “universo cotidiano” de salud general y auto-cuidado.
Y ¿Cuáles son estas técnicas?
Hoy te contaré de una, Pranayama, la práctica milenaria de control consciente de la respiración que forma parte esencial del Yoga.
Esta técnica ha trascendido las fronteras de su origen para ser adoptada y adaptada en la actualidad, rebautizada en Occidente bajo el término más accesible de "Breathwork" o trabajo respiratorio. Esto no solo marca un cambio en la terminología, sino también en la forma en que se presenta y se percibe esta práctica, acercándola a un público más amplio y diverso, lo que es muy positivo.
Aunque "Breathwork" es una etiqueta “paraguas” que abarca una variedad de técnicas de respiración, incluidas, pero no limitadas a, las originadas en el Pranayama, el conocimiento de que la respiración y su modulación consciente guarda un potencial terapéutico enorme viene del Yoga y, muchas de las técnicas utilizadas alrededor de Breathwork, tienen su raíz en técnicas yóguicas fundamentales.
La comercialización de estas prácticas milenarias bajo otro nombre ha sido impulsada, en gran parte, por la creciente demanda de métodos alternativos y holísticos de bienestar y manejo del estrés en Occidente. Centros de bienestar, retiros, talleres y hasta aplicaciones móviles ofrecen sesiones de Breathwork prometiendo beneficios como la reducción de la ansiedad, mejora de la concentración, incremento de la energía y una mayor conexión espiritual. Y es que el trabajo con la respiración ¡funciona! Y, tanto funciona, que este conocimiento ha sobrevivido hasta hoy.
Esta transformación en la presentación y la oferta de Pranayama como Breathwork ha facilitado su integración en la vida cotidiana de muchas personas que, de otra manera, podrían no haberse acercado a estas prácticas. Sin embargo, también ha generado debates sobre la autenticidad y la descontextualización de prácticas espirituales antiguas. A pesar de esto, el auge de Breathwork demuestra un reconocimiento creciente de la importancia de la respiración consciente como herramienta para mejorar el bienestar físico, mental y espiritual, un principio que el Pranayama ha sostenido durante milenios.
Y, para que experimentes por ti mism@ los beneficios del Pranayama, Aquí te paso el enlace a una práctica que incluye, primero, unos movimientos de yoga en silla para despertar la conexión con el cuerpo y la respiración, y luego un ejercicio de Pranayama llamado respiración alterna, todo con imágenes y explicaciones. Si lo pruebas, me encantaría que me cuentes cómo te ha ido. Puedes contestarme a este email, que lo leo directamente.
.Deseo te sirva y te inspire
Un abrazo!
Caro
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